El proyecto de colaboración entre la Dirección General de Salud Pública y Ordenación Farmacéutica, a través de la Delegación Territorial de Salud y Consumo, y el Consejo Regulador de Denominación de Origen (DDO) Málaga y Sierras de Málaga, ha dado inicio con éxito en el Centro de Interpretación del Vino en Ronda (Málaga).
En esta primera jornada, se contó con la presencia del delegado territorial de Salud y Consumo en Málaga, Carlos Bautista, el secretario general de DDO Málaga y Sierras de Málaga, Jose Manuel Moreno Ferreiro, el director de calidad de DDO Málaga y Sierras de Málaga, Francisco Javier Aranda Bautista, y el jefe del Servicio de Salud Pública de la Delegación Territorial, Enrique Moya.
El objetivo principal de este proyecto es mejorar la gestión de la seguridad alimentaria en las instalaciones de producción vinícola de la provincia de Málaga. La Denominación de Origen Protegida (DOP) Málaga cuenta con 38 instalaciones de producción y envasado en toda la región.
Estas instalaciones se distribuyen en diferentes áreas sanitarias de la provincia, incluyendo el Área Sanitaria Este de Málaga Axarquía, el Distrito Sanitario Costa del Sol, el Distrito Sanitario Málaga-Valle del Guadalhorce, el Área Sanitaria Norte de Málaga-Antequera y el Área Sanitaria Serranía de Málaga.
Debido a la variabilidad en el tamaño de estas instalaciones, existen diferentes riesgos y enfoques para abordar los procesos de control. Durante la jornada, se realizó un análisis detallado del concepto de denominación de origen, así como de los pliegos de condiciones y el alcance de los mecanismos de control. También se evaluaron los riesgos en seguridad alimentaria asociados a los modelos productivos y vinos amparados por la DDO Málaga y Sierras de Málaga.